El Mochilero. Capitulo 6: De beer en Guam
Nos vamos de copas en Agaña. Dicese de la actividad de por un buen resultado nacional se logra clasificar a una competición internacional. El Beercelona habia hecho Historia y este pequeño club de amigos universitarios lograban ganar la liga guameña y clasificar a la AFC Confederation Cup, la segunda liga en el orden asiático pues el coeficiente guameño hace que no tenga cupo en Champions.
El segundo partido fue en Agaña, donde fuimos superiores, tiramos más al arco, mejor con más puntería pero igualmente no pudimos quebrar el cero ante el Taipower taiwanés, llevabamos dos puntos en dos partidos y se complicaba la cosa aunque quizá merecíamos cuatro o seis puntos en nuestro haber.
Casi un mes después. recibimos a los profesionales hongkongeses en Agaña y si bien pateamos más. ellos lo hicieron mejor y nos ganaron 2-0 prácticamente sentenciandónos a hacer una vuelta perfecta en la segunda ronda.
En el medio, conseguimos que nos financien los estudios y poder tener la Licencia Nacional B, que nos permitiria subir un poco la reputación. Y en eso llegó el cuarto partido donde el Taipower nos pasó por encima y fue 2-1 la derrota y eliminación de la AFC Confederation Cup por parte del Beercelona.
En estas ligas menores es muy dificil poder hablar de nivel, y principalmente internacionalmente. Cada liga es un microclima y el salir a competir en Asia es un cheque en blanco que no sabes para que lado va a ir. Somos todos amateurs o semiprofesionales, y los mejores de cada país pero la calidad internacional es dificil de medir.
En la primera ronda, tocaba enfrentar al Ulanbataar de la capital mongola, en un partido a ida y vuelta que determinaría quien jugaría la fase de grupos de la competición
La ida en Mongolia
El partido en el verano de la estepa mongola, en la moderna Ulan Bator, fue un partido durísimo, de mucha expectativa. Obviamente nosotros estábamos buscando el gol de visitante que nos permitiera estar un poco más relajado en Guam. Mongolia es un país espectacular, raro, asiatico oriental pero sovietico, vacío pero moderno y las vibras de entrar en lo desconocido estaba en la piel del Mochilero, aun más que aquella vez en Samoa.
A los 16 minutos del primer tiempo, Coates pondría las cosas 1-0 para el Beercelona y respiramos profundo porque ahora habría solo que aguantar los embistes mongoles. Fueron muchos pero no lograron vencer nuestro arco hasta el fatidico minuto 95 que pusieron las cosas en tablas uno por uno y a definir en Agaña
La vuelta en Agaña
Un afano. Simplemente, la única manera para poder definirlo. Un afano. Sin embargo el fútbol es el deporte más hijo de puta y de nada valía el gol de Coates a los 29 ni estar 15 tiros a 0 a los treinta y cinco del primer tiempo. Cualquier descuido podía ser gol de los mongoles y a forzar penales.
El Mochilero pocas veces ha sufrido tanto pero aguantó y el paseo fue 27 tiros a 1, 1-0 para el Beercelona y clasificación a la fase de grupos de la Copa Confederación.
La fase de grupos
Ya venía transcurriendo el campeonato de Guam para el que no trajimos refuerzos y veniamos bastante bie (luego lo repasamos), pero lo importante estaba en la competicion internacional donde quedamos emparejados con: Taipower de Taiwan, Montecarlo de Macao y el Eastern AA de Hong Kong
El primer partido fue en Macao contra el Montecarlo, equipo semiprofesional que se nos plantó bien pero tuvimos nuestro juego. Dickson a los 58 puso la victoria parcial para nosotros y realmente teníamos fe de poder ser el equipo que pasara de fase (imposible igual). A los 95, si, otra vez, un error defensivo pone las cosas 1-1 y un sabor amargo de nuestra visita a Las Vegas made in China.
La trayectoria en la liga nacional
En este punto, el Beercelona marchaba segundo en la liga guameña mano a mano con el Rovers y con la tranquilidad de que los puntos que ha perdido en el camino eran por justamente la AFC Confederation Cup, por lo que el equipo iba a salir campeón indefectiblemente.
La decisión
El Mochilero estaba feliz en Guam. Tenía un equipo ganador, que fue campeón y que indefectiblemente volvería a serlo. Sin embargo, la pasión por conocer nuevos lugares, ligas, estadios, idiomas, personas, lo llevaron a tomar un vuelo hacia el Caribe para afrontar el 2027 a puro fútbol
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